Día 54. Lágrima

Se cayó una lágrima
en un mar de sangre,
rodeado de miles de cadáveres
que un día soñaron con ser amados.

Esa lágrima que cayó me pertenecía.
Era una lágrima de dolor y tristeza
que me hundía en ese mar de agonía.

Y sentía que mi cuerpo se ahogaba,
en aquel siniestro lugar,
donde iban las almas 
a vagar.
Disfrazaré mi dolor 
continuaré sin temor.
Pero he perdido la lágrima
más importante,
de una viajante mendigando
el amor negado y olvidado.